El Ejército ucraniano aseguró este viernes haber infligido a las tropas rusas más de dos mil bajas-entre muertos y heridos- en las últimas 24 horas, un número inusualmente alto para los que suele comunicar Kiev. Según el balance oficial publicado por el mando militar ucraniano, los rusos han perdido a cerca de 740.000 hombres desde el comienzo de la guerra. El parte también hace referencia a la destrucción durante la pasada jornada de 33 vehículos blindados de combate y de 34 sistemas de artillería. Pero ninguno de los dos bandos ofrece información de las pérdidas propias.
Por lo que respecta a la evolución de la situación en el frente, el propio Estado Mayor ha informado de más de doscientos combates a lo largo de todo el frente en las pasadas 24 horas. Las zonas más calientes siguen siendo los ejes de Pokrovsk y Kurájove, dos ciudades de la región oriental de Donetsk que Rusia trata de conquistar desde hace meses. En el frente de Pokrovsk, las tropas ucranianas han repelido durante el último día 61 ataques enemigos. En el de Kurájove, el número de ataques rusos frustrados ha sido de 43, según el Estado Mayor de Kiev. Por su parte, la plataforma ucraniana de análisis de la guerra DeepState ha informado de avances rusos en Kurájove, Velika Novosilka y otros lugares de Donetsk. Según los mapas de movimientos en el frente que ofrece DeepState, las fuerzas rusas siguen empujando para rodear a las tropas ucranianas que defienden Kurájove. Rusia también trata de avanzar hacia su objetivo de rodear a los soldados ucranianos que protegen el territorio situado entre Velika Novosilka y Rivnópil, al sur de Kurájove.
Fuentes militares contactadas por la Agencia EFE confirmaron que las tropas ucranianas se preparan para retirarse de estas posiciones, no sin antes infligir a las tropas rusas el máximo número de bajas posibles. Rusia lleva la iniciativa en el frente desde hace más de un año, y ha acelerado su avance en algunas zonas de la región de Donetsk en las últimas semanas. Kiev pone el acento en el alto número de pérdidas rusas en su ofensiva y confía en que Moscú sufra tal desgaste, que lleve al colapso de sus capacidades. Mientras, las fuerzas ucranianas siguen defendiendo el territorio que conservan en la región rusa de Kursk, conquistado en la operación transfronteriza que Kiev lanzó a principios de agosto. Por su parte, las fuerzas rusas volvieron a lanzar la pasada noche un ataque masivo con drones contra territorio ucraniano, en el que emplearon un total de 132 aparatos no tripulados, según la Fuerza Aérea de Ucrania.