El Arma Secreta de EE.UU. Contra una Pesadilla Ganadera: Millones de Moscas Estériles Caerán del Cielo sobre México

En lo que podría parecer el guion de una película de ciencia ficción, el gobierno de Estados Unidos se prepara para desplegar una estrategia biológica masiva: criar miles de millones de moscas y arrojarlas desde aviones sobre México y el sur de Texas. El objetivo no es un experimento macabro, sino una audaz maniobra para combatir un parásito que devora carne viva, amenazando con devastar la industria ganadera, aniquilar la fauna silvestre e incluso causar la muerte de mascotas.

Esta peculiar tecnología, si bien suena extraña, ha demostrado su eficacia en el pasado, llevando a la erradicación de una de las plagas más destructivas. “Es una tecnología excepcionalmente buena”, afirma Edwin Burgess, profesor adjunto de la Universidad de Florida especializado en parásitos animales. “Es una de las mejores aplicaciones científicas para resolver un problema de gran escala”.

El Enemigo Invisible: La Mosca Barrenadora y su Devastador Apetito

El blanco de esta ofensiva aérea es la larva de la mosca del gusano barrenador del ganado (New World Screwworm). A diferencia de la mayoría de las larvas de mosca, que se alimentan de tejido muerto, esta especie consume tejido vivo, lo que la convierte en una amenaza directa y mortal. Las hembras depositan sus huevos en heridas abiertas o membranas mucosas expuestas de animales, y el efecto es devastador.

“Un bovino de 450 kilos puede morir en dos semanas”, advierte Michael Bailey, presidente electo de la Asociación Estadounidense de Medicina Veterinaria, quien enfatiza el dolor y la incapacitación que provoca la infestación. Don Hineman, un ganadero retirado de Kansas, recuerda con escalofrío haber visto reses infectadas: “Olía horrible, como carne podrida”.

La Solución Genial: Guerra Biológica «Amigable»

La estrategia del Departamento de Agricultura de EE.UU. (USDA) se basa en la Técnica del Insecto Estéril (TIE). El plan es incrementar masivamente la cría de moscas macho, esterilizarlas mediante radiación y liberarlas en grandes cantidades. Estos machos estériles se aparearán con las hembras silvestres, pero los huevos resultantes no serán fertilizados y, por ende, no eclosionarán. Con el tiempo, la población de la mosca disminuye drásticamente hasta desaparecer.

Este método se considera más eficaz y ecológico que el uso de pesticidas, y fue precisamente el que permitió erradicar esta plaga al norte de Panamá décadas atrás. Desde entonces, una fábrica en Panamá ha sido la única productora de estas moscas estériles, manteniendo al insecto contenido. Sin embargo, a finales del año pasado, una alarma se encendió con la detección de la mosca nuevamente en el sur de México.

Expansión Operativa y la Urgencia del USDA

Alarmadas por el avance de la plaga hacia el norte, las autoridades estadounidenses cerraron temporalmente en mayo la frontera sur a la importación de ganado bovino, caballos y bisontes vivos, y no prevén la reapertura completa antes de mediados de septiembre. La preocupación es mayúscula, ya que las hembras pueden depositar huevos en cualquier animal de sangre caliente, incluidos los humanos.

Para combatir el resurgimiento, el USDA planea una expansión sin precedentes. Se espera que una nueva planta productora de estas moscas esté operativa en el sur de México para julio de 2026. Además, se planea abrir un centro de distribución en el sur de Texas antes de fin de año, capaz de importar y distribuir moscas desde Panamá si la situación lo requiere. La inversión es significativa: 8,5 millones de dólares para el sitio de Texas y otros 21 millones para reconvertir una planta en el sur de México, actualmente dedicada a la cría de moscas de la fruta, en una fábrica de gusano barrenador.

La Maquinaria Detrás de los Millones: Cría y Lanzamiento

Criar colonias masivas de moscas no es tarea sencilla, explica Cassandra Olds, profesora adjunta de entomología en la Universidad Estatal de Kansas. «Hay que proporcionar a la hembra las señales necesarias para que ponga huevos, y luego alimentar bien a las larvas». Históricamente, las larvas se alimentaron con carne de caballo y miel, luego con una mezcla de huevos secos y melaza, y hoy en Panamá se usa una combinación que incluye polvo de huevo, glóbulos rojos y plasma de res.

La seguridad es primordial. Sonja Swiger, entomóloga del Servicio de Extensión de Texas A&M, subraya que las instalaciones deben ser herméticas para impedir que los adultos fértiles usados como reproductores escapen.

El lanzamiento aéreo, si bien eficaz, no está exento de riesgos. El mes pasado, una avioneta que soltaba moscas estériles se estrelló cerca de la frontera entre México y Guatemala, cobrando la vida de tres personas. La técnica de lanzamiento, que hoy utiliza avionetas livianas que sueltan cajas con las moscas, se remonta a pruebas en los años 50, cuando se utilizaban vasos de papel y luego máquinas especializadas como el “Whiz Packer”.

Edwin Burgess considera el desarrollo de esta tecnología en las décadas de 1950 y 1960 como uno de los mayores logros del USDA. Sin embargo, expertos agrícolas advierten que las fábricas no deberían cerrarse una vez que la plaga se erradique nuevamente. La lección del pasado es clara: “Algo que creemos tener completamente bajo control —y sobre lo cual declaramos victoria— puede resurgir en cualquier momento”.

SOJ