Las especies exóticas invasoras (EEI), organismos que se propagan fuera de su área natural de distribución causando daños ambientales, económicos y sociales, vuelven a ser noticia con la publicación de un artículo en Nature Ecology and Evolution. Este artículo, basado en el informe de la Plataforma Intergubernamental sobre Biodiversidad y Servicios de los Ecosistemas (IPBES) de 2023, advierte sobre la urgencia de actuar ahora para frenar esta amenaza creciente.
Un problema global de gran escala:
El informe IPBES, considerado la evaluación más completa a nivel global sobre las EEI, revela que estas especies han contribuido a la extinción del 60% de las plantas y animales registradas en el mundo. Se estima que más de 37.000 especies exóticas se han establecido en todo el planeta, de las cuales más de 3.500 tienen impactos documentados.
Chile: No ajeno a la invasión:
En Chile, ejemplos como el visón, un predador que afecta la fauna nativa y los animales de corral, o los castores y el daño que causan a los bosques de la Patagonia, evidencian el problema de las EEI. El Dr. Aníbal Pauchard, académico de la Universidad de Concepción y co-director del informe IPBES, destaca que en nuestro país hay más de mil especies establecidas o naturalizadas, y de ellas, alrededor de 200 podrían categorizarse como invasoras.
Un desafío que requiere acción urgente:
El paper publicado en Nature Ecology and Evolution enfatiza que, si bien el problema es complejo y costoso, existen soluciones al alcance de todos los países. La meta 6 del Marco Mundial de Biodiversidad busca reducir la cantidad de especies invasoras en un 50% para el 2030. Para lograr esto, Chile enfrenta desafíos concretos:
- Fortalecer el Servicio de Biodiversidad y Áreas Protegidas (SBAP): Es necesario que el SBAP incorpore las especies invasoras en su quehacer, tal como lo establece la ley. Esto implica dotarlo de las atribuciones y recursos necesarios para su gestión efectiva.
- Mejorar la gobernanza e institucionalidad: Se requiere una mayor coordinación a nivel interministerial, involucrando no solo al Ministerio del Medio Ambiente, sino también a Agricultura y Salud.
- Aumentar el financiamiento: Se necesitan recursos para la prevención, manejo y control de las EEI.
- Concientizar a la sociedad: Es fundamental que la ciudadanía comprenda la gravedad del problema y la importancia de colaborar en su control.
El cambio climático agrava la situación:
El cambio climático potencia el problema de las EEI, ya que interactúa con otros factores como el cambio de uso del suelo y la contaminación, aumentando su impacto en la biodiversidad y la calidad de vida de las personas.
Un llamado a la acción:
El informe IPBES y el paper en Nature Ecology and Evolution nos recuerdan la urgencia de actuar para frenar la amenaza de las EEI. En Chile, es crucial fortalecer la institucionalidad, aumentar el financiamiento, concientizar a la sociedad y trabajar de manera coordinada para enfrentar este desafío de manera efectiva.