Ruta Médica: Un pilar de apoyo para personas en situación de calle en Concepción. 1.200 atenciones para 282 pacientes

Durante el año 2024, la Ruta Médica del Servicio de Salud de Concepción (SSC) se consolidó como un pilar fundamental en la atención de salud de 282 personas en situación de calle en las comunas de Concepción, Coronel y Lota. Con un presupuesto de 30 millones de pesos, este programa financiado por el Ministerio de Desarrollo Social (MIDESO) logró entregar más de 1.200 prestaciones de salud, demostrando su efectividad y continuidad.

Un equipo comprometido

Un equipo multidisciplinario, compuesto por un coordinador social, una médica, una enfermera y una técnica en enfermería, recorrió durante seis meses diversos puntos de la región, visitando tanto calles como albergues. Su objetivo principal fue brindar atención médica integral a las personas en situación de calle, tomando signos vitales, entregando medicamentos y realizando un seguimiento cercano de su estado de salud.

Patologías más frecuentes

Las patologías respiratorias, exacerbadas por el Plan de Invierno, fueron las más comunes entre las personas atendidas. Cuadros virales, bronquitis e infecciones micóticas fueron algunas de las afecciones tratadas por el equipo médico.

Más que atención médica

La Dra. Rossymar Leal, miembro del equipo, destacó el impacto emocional que genera el trabajo con esta población: «Nos conmueve profundamente poder ayudar a quienes más lo necesitan, brindándoles atención médica y un trato humano».

Resultados y desafíos

Los resultados obtenidos por la Ruta Médica son evidentes: más de mil personas atendidas y un impacto positivo en su calidad de vida. Sin embargo, la problemática de las personas en situación de calle es compleja y requiere de un abordaje integral que incluya no solo la atención médica, sino también el acceso a vivienda, empleo y otros servicios básicos.

Un compromiso continuo

La Ruta Médica demuestra que es posible mejorar la calidad de vida de las personas en situación de calle a través de la entrega de servicios de salud de calidad y un enfoque humano. Este programa se consolida como un ejemplo de cómo la colaboración entre instituciones públicas y privadas puede generar un impacto positivo en la sociedad.