* El Ministerio de Salud entregó un balance con datos actualizados al día 30 de septiembre. Éste reveló que existían 2.625.369 atenciones de especialidad y 334.969 cirugías pendientes. El subsecretario de Redes Asistenciales, Osvaldo Salgado, manifestó que «el compromiso de mantener y mejorar los tiempos de espera depende del aumento de los recursos». En tanto, el director del ISP de la U. Andrés Bello, indicó que esto «no sólo nos debiera preocupar, sino que debiera llamar a escándalo, porque no es que la gente esté recibiendo mala atención sino que se está muriendo mientras espera».
La Subsecretaría de Redes Asistenciales del Ministerio de Salud (Minsal) publicó un balance, precisando que hasta el 30 de septiembre de este 2024, un total de 36.262 pacientes en listas de espera fallecieron sin ser atendidos. El informe también reveló que, en el mismo período, existían 2.625.369 atenciones de especialidad y 334.969 cirugías pendientes, con una demora promedio de 256 y 301 días, según consignó el medio La Tercera. En ese contexto, este 2024 existen 299.383 consultas de especialidad y 59.175 cirugías más en espera, en comparación con el mismo período del año pasado.
El director del Instituto de Salud Pública de la Universidad Andrés Bello, Héctor Sánchez, manifestó al periódico: «Que en menos de un año hayan muerto 36 mil personas en lista de espera, es un tema que a los chilenos no sólo nos debiera preocupar sino que debiera llamar a escándalo, porque no es que la gente esté recibiendo mala atención, sino que se está muriendo mientras espera».
Agregó Sánchez que «La duda que queda es si el fallecimiento tuvo que ver con la espera o fue coincidencia. Los estudios de hace algunos años demostraron que una parte importante de las personas que mueren lo hacen por alguna causa relacionada con la espera. Por lo tanto, el hecho que hayan fallecido más de 30 mil personas, es una situación compleja porque, además, si proyectamos las cifras para lo que queda del año, podríamos tener 40 mil personas, y eso debería ser una preocupación nacional». Por el contrario, el informe también señala que 1.835.198 pacientes egresaron de las listas de espera porque sí recibieron atención en algún establecimiento de la red o por vía remota. Esta información se traduce en que casi el 80% de los pacientes en listas de espera sí son atendidos; mientras que el 20% restante salió del listado por otras razones,de acuerdo con lo señalado por el medio.
Mala gestión de las listas de espera
En ese sentido, 33.909 pacientes fueron egresados porque renunciaron o rechazaron voluntariamente la atención, dato que evidencia los problemas que tiene la red asistencial, según explicó Héctor Sánchez. «Hay casi 34 mil personas que una vez que las contactaron no quisieron ser atendidas, y eso significa que se recuperaron o que se atendieron en el sector privado. Pero eso es una falla neta del sistema, porque las personas, cansadas de esperar, buscan financiamiento para solucionar su afección en centros privados», puntualizó el académico. Asimismo, el balance indica que otros 73.690 egresos de las listas de espera se produjeron porque el paciente registró dos inasistencias a sus horas de resolución; 16.078, porque la solicitud estaba duplicada; 19.557, debido a errores en el registro, y 7.008, porque ya que no correspondía realizar el procedimiento. El especialista aseguró que todas esas causales pueden ser motivo de «mala gestión de las listas de espera».
Minsal: El problema de los recursos
El subsecretario de Redes Asistenciales, Osvaldo Salgado, acaba de presentar un informe sobre las listas de espera no GES y garantías de oportunidad retrasadas durante el tercer trimestre de 2024. «Si bien los casos han aumentado, los tiempos de espera para intervenciones quirúrgicas y consultas nuevas de especialidad muestran una tendencia a estabilizarse, con un leve aumento de la mediana de tiempo de espera en relación a diciembre de 2023″, enfatizó el funcionario. En cuanto a la discusión del presupuesto de Salud para 2025, Salgado fue claro en sostener que «la lista de espera requiere más recursos. Eso está demostrado aquí, en otros países también; de manera que creo que no hay mucha discusión respecto a eso. Por lo tanto, el compromiso de poder mantener y mejorar los tiempos de espera depende del aumento de los recursos».
El subsecretario también expresó que lo anterior no puede ser solamente durante un período en específico, sino que se necesita «de una política de Estado sostenida y a largo plazo». Mantener la espera de los pacientes en un nivel razonable para controlar y mantener en un nivel razonable de espera a la población. «Esperamos que el presupuesto que se apruebe dé cuenta de eso», concluye el vespertino citado.