El CABI Británico y el INIA de Chillán: Gestión por la agricultura internacional libre de químicos

Los integrantes del CABI (Centre for Agricultural Bioscience International) visitaron dependencias de INIA Quilamapu de Chillán, el mayor grupo de investigación en el control biológico de Chile. Esto llamó la atención Richard Shaw, director para Europa y América de este organismo inglés de gran prestigio entre la comunidad científica agrícola. 

Un llamado a la acción: El uso de agroquímicos en la agricultura ha generado una creciente preocupación a nivel mundial. En este contexto, el Centro Internacional de Biociencia Agrícola (CABI) y el Instituto de Investigaciones Agropecuarias (INIA) Quilamapu en la capital de Ñuble se unen para impulsar el control biológico como una alternativa sostenible.

Intercambio de conocimientos: Richard Shaw, director para Europa y América de CABI, y Yelitza Colmenarez, directora del CABI para Brasil y América Latina, visitaron las instalaciones de INIA Quilamapu de Chillán, donde se concentra el mayor grupo de investigación en control biológico del país. El objetivo: conocer el trabajo de innovación e investigación realizado por INIA en el desarrollo de controladores biológicos que combaten plagas y enfermedades agrícolas, reduciendo el uso de químicos y su impacto ambiental.

Lazos de investigación: La larga trayectoria de Chile en control biológico, iniciada con la fundación de INIA en 1964, ha permitido avances significativos en la conservación de recursos genéticos, desarrollo e investigación de biocontroladores y generación de productos para el mercado.

Un futuro verde: Ambas instituciones buscan estrechar lazos para potenciar el desarrollo económico local, enfrentar el cambio climático, respetar la biodiversidad, incorporar la perspectiva de género y juventud, y garantizar la seguridad alimentaria y nutricional de la población.

Bioinsumos: un potencial sin explotar: El desarrollo y uso de microorganismos nativos chilenos como bioproductos o bioestimulantes en la agricultura abre un camino hacia la agricultura sostenible. El trabajo conjunto de INIA, CABI, Conaf y SAG en este ámbito es fundamental para la protección del medio ambiente y la salud de las personas.

Combatiendo la Drosophila suzukii: El trabajo del laboratorio de entomología de INIA Quilamapu en la búsqueda de insectos nativos para controlar la plaga Drosophila suzukii ha llamado la atención del CABI. Ambas instituciones se encuentran trabajando en conjunto para encontrar una solución con control biológico clásico, sin uso de químicos.

Un futuro promisorio: La colaboración entre CABI e INIA abre un camino hacia una agricultura más sostenible, resiliente y amigable con el medio ambiente, orgánica y completamente libro de químicos.