El icónico Pingüino de Humboldt, especie endémica de las costas de Chile y Perú, ha pasado de la categoría «Vulnerable» a la crítica de «En Peligro de Extinción». Esta drástica reclasificación no es solo un cambio en la nomenclatura de conservación, sino una señal de alerta global que subraya la creciente e insostenible presión de la actividad humana sobre los frágiles ecosistemas costeros chilenos.
El descenso poblacional es dramático: a fines de los años 90 se estimaban unos 45 mil individuos; hoy, según el Dr. José Celis Hidalgo de la Facultad de Ciencias Veterinarias de la UdeC, son menos de 20 mil.
🧪 La Ciencia de la UdeC Revela la Amenaza Oculta
Frente a la crisis, investigadores de las Facultades de Agronomía y Ciencias Veterinarias UdeC han liderado, desde 2011, una línea de investigación pionera enfocada en la contaminación ambiental como factor clave del declive. Sus hallazgos demuestran que la amenaza va mucho más allá de la gripe aviar o la pesca comercial.
El equipo ha evidenciado un cóctel de contaminantes que envenenan el hábitat del pingüino:
- Metales Pesados y Minería: Cerca del 80% de la población de pingüinos en la costa norte podría estar afectada por el desarrollo de la actividad minera. Ya en 2011, estudios en colonias como Pan de Azúcar e Isla Chañaral detectaron una alta correlación entre metales y biomarcadores de exposición, sugiriendo alteraciones bioquímicas que hacen a las aves más vulnerables a enfermedades. Investigaciones posteriores, en 2023, incluso detectaron un incremento significativo en los niveles de plomo en los suelos de anidación.
- Contaminantes Emergentes: El Dr. Celis y su equipo han detectado sustancias perfluoradas —químicos industriales presentes en productos cotidianos como el teflón— en las presas del pingüino. Estos compuestos, cancerígenos y disruptores endocrinos, están dispersándose ampliamente, generando graves riesgos para la fauna y la salud humana.
- Tierra Raras y Microplásticos: Investigaciones recientes también han identificado la presencia de elementos de tierras raras (asociados a la tecnología moderna) en los suelos de anidación, así como la confirmación de microplásticos en concentraciones elevadas, como lo demostró un reciente trabajo de tesis.
El Dr. Winfred Espejo Contreras, de la Facultad de Agronomía, destacó que las concentraciones de contaminantes en las zonas de anidación son consistentemente mayores que en las áreas de referencia, señalando que una gestión ambiental inadecuada podría intensificar esta amenaza.
En resumen, la crítica situación del Pingüino de Humboldt es un reflejo tangible de la degradación ambiental costera. Los expertos de la UdeC concluyen que la supervivencia de esta especie exige urgentes estrategias de mitigación que aborden la contaminación crónica, cuyo impacto no se limita a la fauna marina, sino que tiene el potencial de afectar a los ecosistemas terrestres y, eventualmente, a los humanos.
SOJ





