Papa León XIV la paz en Gaza: «No hay futuro en la violencia»

En un emotivo llamado, el Papa León XIV expresó este domingo la solidaridad de la Iglesia con el pueblo de Gaza, a la que calificó como una «tierra martirizada». Al término del rezo del Ángelus en la Plaza de San Pedro, el pontífice declaró ante miles de fieles que «no hay un futuro basado en la violencia, el exilio forzado ni la venganza». Su mensaje llega en un momento crítico, mientras Israel intensifica sus operaciones militares en la Franja de Gaza.

«Toda la Iglesia expresa su solidaridad con los hermanos y hermanas que sufren», dijo el Papa, quien también enfatizó que «la gente necesita paz» y que «quienes la aman de verdad, trabajan por ella». En su intervención, el líder católico agradeció a las organizaciones que brindan ayuda humanitaria en la región.


Reitera su llamado a un alto el fuego y el respeto a los derechos humanos

Este pronunciamiento es una continuación de los constantes llamados del pontífice a la paz en el conflicto. Durante una audiencia general la semana pasada, León XIV ya había manifestado su «profunda solidaridad» con el pueblo palestino, describiéndolo como una población que «sigue viviendo con miedo y sobrevive en condiciones inaceptables, obligado por la fuerza a abandonar una vez más sus tierras».

En esa ocasión, el Papa citó principios fundamentales al recordar que «toda persona tiene siempre una dignidad inviolable que debe ser respetada y protegida». Por ello, renovó su llamado a un «alto el fuego, la liberación de los rehenes, una solución diplomática negociada y el pleno respeto del derecho internacional humanitario».


Crítica a la indiferencia y a los líderes mundiales

La postura de León XIV sobre la justicia social y la violencia también se reflejó en la homilía que pronunció en la parroquia de Santa Anta. El Papa lamentó que «pueblos enteros se ven hoy aplastados por la violencia y, más aún, por una indiferencia desvergonzada que los abandona a un destino de miseria».

En su discurso, instó a los fieles a «perseverar con esperanza» y a no ser «sumisos ante estos dramas». Además, criticó a los líderes mundiales, pidiendo que se liberen de la «tentación de utilizar la riqueza contra el hombre» y que eviten transformar el bien común en «presa de su propia codicia».

Estas reflexiones del Papa, enmarcadas en el contexto del Jubileo de la Justicia, subrayan su convicción de que «donde no hay justicia, no hay tampoco un Derecho», y reflejan la posición constante del Vaticano de buscar soluciones pacíficas y humanitarias para los conflictos globales.

SOJ