Así quedó la sala donde todo comenzó.
Moscú, 23 de marzo de 2024 – El brutal atentado terrorista que sacudió a la capital rusa, Moscú, hasta ahora deja un saldo de al menos 133 personas sin vida y un número indeterminado de heridos. El ataque, reivindicado por el Estado Islámico, ha golpeado a la sociedad rusa y al mundo entero.
El escenario del horror: El ataque se produjo en el Crocus City Hall, un centro cultural y de eventos ubicado en Krasnogorsk, a las afueras de Moscú. El recinto albergaba un concierto del grupo Piknik al momento del ataque.
Imágenes dantescas: Videos y fotos difundidos en redes sociales muestran a personas huyendo despavoridas del recinto mientras una densa nube de humo negro se eleva desde el edificio. El fuego, que se prolongó por horas, consumió cerca de un tercio del Crocus City Hall.
Las víctimas: Un dolor irreparable: La mayoría de las víctimas eran jóvenes que asistían al concierto. El presidente Vladimir Putin ha expresado sus condolencias a los familiares de las víctimas y ha ordenado brindar toda la asistencia necesaria a los heridos.
Respuesta inmediata: Las fuerzas de seguridad rusas han desplegado un operativo de gran magnitud para dar con los autores del atentado. Se han abierto investigaciones criminales y se ha elevado el nivel de alerta en todo el país.
Condena unánime: Líderes mundiales y organismos internacionales han condenado enérgicamente el ataque terrorista en Moscú. La Casa Blanca, la Unión Europea, la ONU y otros países han expresado su solidaridad con las víctimas y sus familias.
Un ataque a la libertad y la paz: Este atentado es un ataque a la libertad, la paz y la seguridad de todos. La comunidad internacional debe unirse para combatir el terrorismo y evitar que tragedias como esta se repitan.
Esta tragedia explicita que el terrorismo es una amenaza global que afecta a todos.