Este inmueble se sitúa en el camino al aeródromo María Dolores.
Los Ángeles, 22 de marzo de 2024 – Este escándalo ha sacudido los cimientos de la Universidad de La República. Una sentencia inapelable del Primer Juzgado de Letras de Los Ángeles la ha condenado a restituir una propiedad y pagar una deuda astronómica que supera los $140 millones de pesos.
A pesar de esta resolución, el propietario del inmueble, el empresario Gerardo Godoy, aún no ha recibido ningún pago ni ha obtenido un compromiso firme de liquidación por parte de la institución educativa. Por esta razón es que la parte demandante evalúa solicitar la liquidación forzada, es decir la quiebra de la Universidad de La República.
Un contrato que se convirtió en pesadilla:
- En 2015, Gerardo Godoy firmó un acuerdo con la Universidad para el arriendo de un recinto en el camino a María Dolores.
- Los primeros años transcurrieron apaciblemente, pero al finalizar el quinquenio inicial, los pagos mensuales se transformaron en un calvario para Godoy.
Impagos y renovaciones contra toda lógica:
- A pesar de los retrasos, Godoy, confiando en la palabra de la Universidad, renovó el contrato.
- Las irregularidades persistieron, obligándolo a presentar una demanda en 2021.
Un fallo inapelable que la Universidad ignora:
- En mayo de 2021, la justicia falló a favor de Godoy, ordenando el desalojo del recinto y el pago de la deuda acumulada.
- La sentencia quedó ejecutoriada en octubre del mismo año.
Un gigante tambaleante:
- A pesar de la orden judicial, la Universidad se ha negado a cumplir con sus obligaciones.
- Godoy, sin recibir ni un centavo, ha presentado una liquidación actualizada de la deuda, que supera los $140 millones.
Un futuro incierto y la sombra de la insolvencia:
- La falta de pago ha forzado a Godoy a refinanciar su hipoteca para evitar el remate del inmueble.
- Ante la inoperancia de la Universidad, su equipo legal evalúa solicitar la liquidación forzada de la institución, ante la ausencia de bienes para embargar.
Un escándalo que mancha la imagen de la Universidad de La República. La sombra de la insolvencia se cierne sobre la institución, mientras Godoy lucha por recuperar su propiedad y el dinero que le corresponde.