Grave incidente en Indonesia pone en tela de juicio la seguridad aérea.
Un aterrador incidente impacta al mundo de la aviación: dos pilotos de un avión de pasajeros de Batik Air, en un vuelo entre Kendari y Yakarta, Indonesia, se durmieron durante al menos 28 minutos mientras la aeronave se encontraba en pleno vuelo, poniendo en riesgo la vida de 153 pasajeros y cuatro auxiliares de vuelo.
Dormidos en el cielo: una grave negligencia
El informe del Comité Nacional de Seguridad en el Transporte de Indonesia revela que el incidente ocurrió el pasado 25 de enero a bordo de un Airbus 320 de la aerolínea Batik Air. A pesar de la negligencia de los pilotos, afortunadamente no hubo daños ni heridos entre los pasajeros y la tripulación.
Cronología de una irresponsabilidad:
- El capitán, tras solicitar permiso al copiloto, se duerme durante 45 minutos.
- Tras una breve conversación, el capitán vuelve a dormirse, esta vez con el consentimiento del copiloto.
- El copiloto, intentando mantener contacto con tierra para modificar el curso debido al mal tiempo, también se queda dormido.
- Los controladores de Makassar y Yakarta intentan contactar sin éxito con la tripulación mientras el avión se desvía de su ruta.
- Finalmente, después de 28 minutos de silencio, el capitán despierta y corrige el rumbo.
- La aeronave aterriza sin mayores problemas en Yakarta.
Fatiga de la tripulación: un peligro latente
Este incidente pone de relieve la grave problemática de la fatiga de la tripulación en el ámbito de la aviación comercial. El Comité Nacional de Seguridad en el Transporte ha instado a Batik Air a implementar medidas como:
- Controles periódicos en cabina para evitar que situaciones como esta se repitan.
- Asegurar que tanto pilotos como tripulación tengan un descanso adecuado antes de cada vuelo.
Un llamado a la acción:
Es crucial que las autoridades aeronáuticas y las aerolíneas tomen medidas contundentes para garantizar la seguridad de los pasajeros. La fatiga de la tripulación no puede ser ignorada y debe ser abordada con medidas proactivas que eviten futuros incidentes.
Un recordatorio aterrador:
Este caso, junto al de Ethiopian Airlines en agosto de 2022, donde los pilotos también se durmieron en pleno vuelo, nos recuerda que la seguridad aérea no puede ser comprometida bajo ninguna circunstancia. Es necesario un cambio urgente en la industria para evitar que estos terribles eventos se repitan.