Entre los sobrevivientes de la tragedia: Bautista Guerrero Matta, un joven de 23 años que, gracias a su coordinación, concentración, valentía y rapidez, evitó que el helicóptero Robinson se hundiera con cuatro personas a bordo.
Es estudiante de Derecho y voluntario de bomberos, viajaba en el helicóptero junto a su padre, Ignacio Guerrero, y Magdalena Piñera, hermana del expresidente. Tras la caída del aparato, Bautista logró abrir la puerta y salir a la superficie, guiando implícitamente a su padre y a Magdalena.
Su formación como bombero y su temple en situaciones de emergencia fueron claves para la supervivencia de los tres. A pesar de su juventud, Bautista demostró una madurez y un coraje y hasta frialdad admirables que lo convierten sin ni siquiera pensarlo en una suerte de héroe inesperado.
Más allá de su heroica acción, Bautista es un joven de bajo perfil, culto y con gran capacidad de argumento. Sus amigos lo describen como alguien con un gran sentido del humor, inteligencia y madurez. Su familia, pilar fundamental en su vida, también ha sido clave en la formación de su carácter.
Bautista es hijo de Carolina Matta e Ignacio Guerrero, y tiene dos hermanos: Santiago y Carolina.
La tragedia del Lago Ranco ha dejado una profunda huella en Chile. Sin embargo, la historia de Bautista Guerrero nos brinda un mensaje de esperanza y nos recuerda que siempre hay héroes dispuestos a darlo todo por los demás. Su valentía y su espíritu de servicio son un ejemplo para todos, especialmente para las nuevas generaciones.
Bautista se ha convertido en un símbolo. Su imagen será la de un joven que, en un momento crítico, demostró un valor excepcional y salvó vidas.