Tecnología y Medicina: Exoesqueleto robótico ayuda a caminar a pacientes con Parkinson

Se trata de un dispositivo blando desarrollado en conjunto por investigadores de la Universidad de Harvard y la Universidad de Boston ha demostrado ser eficaz para ayudar a los pacientes de Parkinson a superar la congelación o el bloqueo al caminar, un síntoma muy común y debilitante de la enfermedad.

La congelación de la marcha se caracteriza por episodios repentinos de inmovilidad, a menudo a mitad de camino. Los pacientes con Parkinson pueden permanecer congelados durante varios segundos o minutos, lo que puede ser peligroso y dificultar sus actividades diarias.

Los investigadores probaron el exoesqueleto en un hombre de 73 años con Parkinson que había experimentado episodios de congelación incapacitantes a pesar del tratamiento previo con cirugía y medicamentos.

Sin ningún entrenamiento especial, el exoesqueleto permitió al paciente caminar sin ningún episodio de congelación en el interior y con solo episodios ocasionales al aire libre.

El paciente también caminaba más rápido y más lejos de lo que podía sin el dispositivo, y podía caminar y hablar sin congelarse, lo que a menudo no podía hacer sin el exoesqueleto.

El dispositivo, que utiliza motores accionados por cable y sensores que se usan alrededor de la cintura y los muslos, proporciona un suave empujón a las caderas a medida que la pierna se balancea.

Los investigadores esperan que el dispositivo proporcione nuevos conocimientos sobre por qué los pacientes de Parkinson se congelan.

“Debido a que en realidad no entendemos la congelación, en realidad no sabemos por qué este método funciona tan bien”, dijo el investigador Terry Ellis, director del Centro de Neurorrehabilitación de la Universidad de Boston.

“Pero este trabajo sugiere los beneficios potenciales de una solución ‘de abajo hacia arriba’ en lugar de ‘de arriba hacia abajo’ para tratar la congelación de la marcha”, continuó Ellis. “Vemos que restaurar la biomecánica casi normal altera la dinámica periférica de la marcha y puede influir en el procesamiento central del control de la marcha”.

Los investigadores planean realizar más estudios para evaluar el exoesqueleto en un grupo más grande de pacientes.