El gobernador Claudio Orrego insistió este miércoles en decretar Estado de Excepción Constitucional para la Región Metropolitana, sobre todo tras el homicidio de un niño de 5 años, en la comuna de Padre Hurtado. Ante la crisis que vive el país en materia de seguridad, frente al aumento de la delincuencia a niveles inéditos, la medida también fue exigida por alcaldes de diversas comunas, quienes sostuvieron una reunión con autoridades del Gobierno para abordar lo que está sucediendo. Pero frente a este escenario, la ministra del Interior, Carolina Tohá, aseguró que no existe «sesgo ni prejuicio» para decretar la disposición, pero que ahora «no es la herramienta más apropiada».
Según dijo, «cada vez que hay ideas y propuestas, las evaluamos, las consideramos y, respecto al Estado de Excepción, nuestro Gobierno no tiene ningún sesgo ni prejuicio contra el despliegue militar (…). Tras ello, indicó que «hemos hecho las evaluaciones, y no solos, sino que con expertos, con las policías, y se ha llegado a la conclusión de que no es la herramienta más apropiada». Después agregó que «estamos siempre dispuestos a evaluar nuevamente. En estos días lo hemos hecho varías veces y reiteramos, porque es necesario dar la tranquilidad a toda la población, a todas la autoridades, que este Gobierno ocupará todas las herramientas que sean útiles para esta labor y que se ajusten al Estado de Derecho».