La semana pasada, activistas de Greenpeace protagonizaron una acción pacífica contra un barco que realiza exploración minera en aguas profundas para The Metals Company (TMC). Bajo una lluvia torrencial y a bordo de kayaks lanzados desde el buque Arctic Sunrise, de Greenpeace, activistas remaron y protestaron alrededor de este barco especializado en perforación en alta mar. En el equipo de voluntariado a bordo de la embarcación de la ONG, que busca detener la minería submarina en México, se encuentra la chilena de Greenpeace, Francisca Inostroza, periodista, quien con 23 años de edad fue elegida por el equipo de Greenpeace Internacional para formar parte de la tripulación de esta expedición en aguas internacionales.
“Desde hace 5 años soy voluntaria de Greenpeace en Chile, participando en distintas campañas como Nomassalmoneras, Sueltaelagua y Noadominga, para frenar los impactos de las industrias extractivistas en nuestro país. Hoy, gracias a esta labor, tengo la oportunidad de poder colaborar en campañas internacionales como marinera y activista, y detener los impactos de la minería en aguas profundas”, explicó Francisca Inostroza. Y añadió: “La contaminación lumínica y acústica, además de las descargas de sedimentos que podrían aumentar la turbidez en la columna de agua y movilizar contaminantes, son los efectos de la minería subterránea que afectará la vida de muchas especies, incluyendo cetáceos. Por esta razón quise venir hasta acá a defender los ecosistemas que están en peligro en esta zona”.