Los parlamentarios anunciaron que votarán rechazo al proyecto de nueva Constitución el cual será sometido a plebiscito el próximo 17 de diciembre. Se trata de Rojo Edwards (Partido Republicano), Juan Castro (independiente, exRN) y Alejandro Kusanovic (independiente, exRN).
Juan Castro señaló que la aprobación de una nueva Constitución «extenderá por varios años la discusión constitucional y la incertidumbre». El senador agregó que no solo se perderían más de 40 años de jurisprudencia y certezas jurídicas, sino que su implementación llevaría décadas, «relegando una vez más las urgencias sociales de los chilenos». Castro manifestó que la propuesta “crea derechos colectivos y grupos de personas privilegiados”.
En tanto, Kusanovic indicó que el proyecto de nueva Constitución «es un texto que no representa a la mayoría de los chilenos». El senador agregó que la aprobación de la nueva Constitución «perjudicará la economía y la estabilidad del país». Alejandro Kusanovic expresó que “la posibilidad de una nueva Constitución no resuelve los problemas que la propia ciudadanía ha levantado”. Además, realizó un llamado a la clase política a hacer “un mea culpa por lo que ha pasado en Chile”, agregando que “estamos resolviendo el tema equivocado”.
Por su parte, el senador del Partido Republicano, Rojo Edwards, sostuvo que el texto propuesto “modificar todos los derechos y libertades por ley simple, permite la judicialización de los derechos sociales”. “El Estado sufrirá un crecimiento elefantiásico, nos endeudaremos, dejaremos de crecer y generar empleos”, agregó Edwards. Edwards, quien impulsó un plebiscito interno en su partido para que la militancia decidiera su postura, indicó que el resultado de la consulta fue «contundente» y que el 70% de los militantes se inclinó por el rechazo. El senador agregó que también postuló la posibilidad de que se entregue libertad de acción a los parlamentarios de su partido, pero que esta opción no fue aceptada por la directiva.
Los argumentos de los senadores que votarán rechazo se centran en la incertidumbre que generaría una nueva Constitución, así como en los costos económicos y sociales que su implementación conlleva. Estos argumentos podrían resonar con un sector importante de la población, que aún no se ha decidido por la opción que votará en el plebiscito.
En el contexto actual, donde la inflación y la inseguridad son las principales preocupaciones de los chilenos, el proyecto de nueva Constitución se enfrenta a un escenario adverso. Los anuncios de los tres senadores podrían consolidar la tendencia rechazo y dificultar aún más la aprobación del texto.