El innovador avión eléctrico ALIA eVTOL de la compañía estadounidense Beta Technologies aterrizó este jueves en la Base Aérea de Eglin, en Florida, luego de un viaje de 3.217 kilómetros desde Burlington, Vermont.
El avión, que ha volado más de 41.843 kilómetros a lo largo de tres años, fue abastecido de energía en la red de estaciones de carga de Beta en cuatro de sus paradas, incluyendo una nueva ubicación cerca de Boston.
Beta Technologies, que recientemente inauguró su fábrica en el Aeropuerto Internacional de Burlington, está colaborando con el ejército de Estados Unidos para probar la aeronave para misiones de reabastecimiento, entrega de carga y transporte de personal.
Durante su recorrido hasta Florida, la aeronave voló sobre Washington D.C., siendo el primer avión eléctrico en atravesar el espacio aéreo altamente restringido, alrededor del Aeropuerto Nacional Ronald Reagan en vigor desde el 11 de septiembre, antes de aterrizar en la Base Aérea de Andrews en Maryland.
Un hito
El aterrizaje del ALIA eVTOL en Florida representa un hito importante para la aviación eléctrica. El avión ha demostrado ser capaz de realizar vuelos de larga distancia de manera eficiente y silenciosa, lo que lo convierte en una opción viable para una variedad de aplicaciones.
Beta Technologies prevé que su avión eléctrico será especialmente útil para vuelos de alimentación de carga cortos y transporte de donación de órganos. La compañía ya ha recibido pedidos firmes de UPS, Bristow, Blade y United Therapeutics.
La competencia
Beta Technologies no es la única empresa que está desarrollando aviones eléctricos de despegue y aterrizaje vertical (eVTOL). Otras compañías, como Joby Aviation y Vertical Aerospace, también están trabajando en este tipo de aeronaves.
La competencia en el espacio eVTOL se está intensificando, ya que las empresas buscan posicionarse para liderar el mercado de la aviación eléctrica.