Investigadora de la UBB transforma suero de leche en suplemento nutritivo

Economía Circular: La UBB y Ci2030 crean tecnología para reutilizar un subproducto de la industria lechera que hasta ahora se desperdiciaba.

La iniciativa, liderada por la Dra. Jeannette Vera, convierte el suero de leche en un alimento rico en proteínas para el ganado, reduce así el impacto ambiental y mejorando la economía de los ganaderos.

Una innovadora iniciativa de la Universidad del Bío-Bío (UBB), perteneciente al Consorcio Sur-Subantártico Ciencia 2030 (Ci2030), busca transformar el suero de leche en un suplemento nutritivo para el ganado.

La iniciativa, liderada por la Dra. Jeannette Vera, académica del departamento de Ciencias Básicas en la Facultad de Ciencias de la UBB, se basa en la economía circular y la transferencia tecnológica para abordar un problema ambiental y económico frecuente en la pequeña y mediana industria ganadera: el desecho del suero de leche.

El suero de leche es un subproducto del proceso artesanal de fabricación de queso y quesillo. Se trata de un líquido viscoso que contiene proteínas, lactosa y minerales.

«El suero de leche es un recurso valioso que se desperdicia en grandes cantidades», señaló la Dra. Vera. «En Chile, se estima que se producen alrededor de 1.500 millones de litros de suero de leche al año, de los cuales solo se aprovecha una pequeña parte».

El desecho del suero de leche puede tener un impacto negativo en el medio ambiente. Cuando se vierte en ríos y acequias, puede causar eutroficación, un proceso que fertiliza el agua y provoca el crecimiento excesivo de algas y microorganismos. Esto puede agotar los niveles de oxígeno y afectar negativamente a la vida acuática.

El proyecto de la UBB y Ci2030 consiste en desarrollar un desecador que concentra las proteínas presentes en el suero de leche. El producto final es un polvo rico en proteínas que puede ser utilizado como suplemento alimenticio para el ganado.

«Este proyecto tiene el potencial de transformar la gestión de residuos y promover la economía circular en toda la industria ganadera chilena», aseguró la Dra. Vera.

La implementación del proyecto se logró en el tiempo sorprendentemente corto de 6 meses. Esto demuestra la eficacia y la agilidad del enfoque interdisciplinario respaldado por la transferencia tecnológica.

«La idea ahora es proyectar este desarrollo para transferirlo en otros proyectos ganaderos», aseguró la Dra. Vera.

El proyecto destaca la importancia de la colaboración entre la academia, la industria y las instituciones gubernamentales.

«Este proyecto es una muestra de cómo la ciencia puede contribuir a solucionar problemas ambientales y económicos», señaló la Dra. Leyla Cárdenas, Directora del Consorcio Ci2030.

El proyecto fue financiado por Corfo y cuenta con el apoyo de la Asociación Gremial de Productores de Leche.