Victoria’s Secret (VS) volvió a la pasarela en Nueva York, tras cuatro años de ausencia y varias polémicas.
La marca presentó una nueva generación de modelos, más inclusiva y diversa, que incluyó a ángeles icónicos como Adriana Lima, así como a otras supermodelos como Naomi Campbell, Gigi Hadid, Candice Swanepoel y Lily Aldridge.
También hubo espacio para modelos transgénero, de talla grande e indígenas, como Valentina Sampaio, Paloma Elsesser, Quannah Chasinghorse y Winnie Harlow.
El desfile, que fue un adelanto del documental «The Tour ’23», se transmitió en vivo por Amazon Prime Video.
El filme, que se estrenará el 26 de septiembre, mostrará a los equipos creativos de VS diseñando lencería en Bogotá, Londres, Tokio y Lagos.
También contará con entrevistas a modelos, activistas y otras mujeres que representan los valores de la nueva VS.
La marca se ha reinventado en los últimos años para dejar atrás sus polémicos cánones de belleza, centrados en la delgadez y la juventud.
En 2019, canceló su desfile anual por primera vez en 24 años, tras las denuncias de acoso sexual y represalias en el entorno de trabajo.
También retiró a sus «ángeles», las modelos que desfilaban con alas a la espalda.
En su lugar, ha elegido como embajadoras a activistas, actrices y deportistas, y ha comenzado a mostrar cuerpos diversos en su publicidad.
El retorno de VS a la pasarela es una apuesta por la diversidad y la inclusión, y una señal de que la marca quiere recuperar el favor del público.
