En el escenario energético chileno, el séptimo mes del año 2023 marca un hito crucial: la generación renovable se ha alzado con un rotundo 71% de predominio sobre la generación térmica, según el análisis detallado de Generadoras de Chile.
Este logro contrasta con el panorama que se vivía durante el mismo período en 2017, donde no hubo un solo día en el que la energía renovable superara a su contraparte térmica. Para contextualizar este avance, es importante destacar que, desde que se llevan registros minuciosos de estas cifras en 1999, no se había observado que la generación renovable eclipsara en más de la mitad de los días a la generación térmica en este lapso.
Desde el año 2017 en adelante, se ha forjado un constante incremento en la contribución de fuentes renovables en el panorama de generación eléctrica nacional. Este fenómeno se traduce en un crecimiento sin precedentes en la implementación de proyectos renovables en el país. «El desarrollo de proyectos renovables en Chile ha sido sin igual. En tan solo 15 años hemos presenciado la materialización de más de 8 GW en proyectos solares, 4.5 GW en proyectos eólicos y 2.5 GW en proyectos hidroeléctricos de pasada», señaló Francisco Muñoz, Director de Estudios de Generadoras de Chile.
Cambio en la Matriz Energética
La incursión masiva de recursos provenientes de fuentes renovables ha dejado una huella significativa en el paradigma de generación energética chilena, llevando al año 2023 a erigirse como un período histórico con generación renovable que establece nuevos récords.
Durante el primer semestre de este año, la participación de energía renovable ha alcanzado un notable 54% en comparación con la generación total. Este dato marca un incremento de 17 puntos porcentuales respecto al 37% registrado en 2017.
«Las perspectivas para el resto del año son igualmente alentadoras y se anticipa un continuo aumento en la contribución de fuentes renovables a la generación», aseguró Muñoz.
Hasta julio de 2023, más de 7 GW de proyectos renovables se encuentran en etapas de construcción, abarcando centrales solares, eólicas, hidroeléctricas y sistemas de almacenamiento. Estos proyectos, que entrarán en operación durante los años 2023 y 2024, tendrán una presencia predominante en regiones estratégicas del país como Antofagasta (37%), El Maule (11%) y la Región Metropolitana (11%). Este impulso refuerza la consolidación de Chile como un actor relevante en la adopción y promoción de energías renovables en la región.