El Ministerio de Hacienda prepara un ajuste fiscal para cumplir con la meta proyectada para este año. Sería la segunda ocasión en que algo así sucede durante el actual Gobierno, tras el recorte de un 23% ejecutado en el Presupuesto del 2022. Según consignó El Mercurio, una de las alternativas que estaría evaluando el Ejecutivo es una reasignación que implique un recorte en torno a los dos mil millones de dólares en el Presupuesto que se ejecuta este año. Frente a esta medida, el ministro del ramo, Mario Marcel, dijo que “la política fiscal está formulada en torno a ciertas metas para cada año, lo que ocurre cuando se prepara el Presupuesto Nacional. Pero durante la ejecución del Presupuesto van cambiando ciertas cosas. Van cambiando los ingresos y las prioridades de gasto”.
Añadió que“si uno quiere cumplir con sus compromisos fiscales, tiene que estar preocupado de que la ejecución presupuestaria vaya siendo consistente con eso. En este caso hemos tenido menores ingresos de lo presupuestado en la Operación Renta y en parte de la tributación minera, y en el caso del gasto hemos tenido gastos mayores a los presupuestados en el área de la salud y también ligado a las respuestas de las emergencias que hemos tenido, tanto a los incendios forestales en el verano como las inundaciones durante el invierno. Para asegurarnos de que cubrimos esas necesidades sin dejar de cumplir los compromisos fiscales, es necesario ir ajustando. Ésta es una época del año en la cual es más fácil hacerlo, porque a estas alturas los ministerios y servicios públicos saben qué cosas se están ejecutando a tiempo y qué cosas se han ido atrasando. Entonces, eso permite liberar algunos recursos y poder cumplir con los objetivos”.
Sobre los ingresos que ha percibido el fisco este año, Marcel comentó que “han estado del orden de los dos mil 500 millones de dólares por debajo de lo que se había presupuestado y, por otro lado, hay un gasto adicional en salud que también ha sido importante. Éste es el contexto dentro del cual se van ajustando los presupuestos. Es algo bastante normal hacerlo. No es algo particularmente excepcional, y tiene lugar en un contexto en el cual el gasto público va a crecer en su conjunto durante 2023. No es un tema para reducir el gasto público”.