Hawai continúa en llamas: aumenta a 80 el número de muertos y la destrucción es casi total en Lahaina, la antigua capital de la isla

La cifra de personas muertas por los incendios que han asolado la isla hawaiana de Maui en los últimos días ascendió a 80, una tragedia que ha arrasado ciudades como Lahaina, cuya reconstrucción costará más de 5.520 millones de dólares. Todavía hay varios focos activos en la ínsula, y los bomberos continúan trabajando para extinguir incendios en Lahaina, Pulehu/Kihei y Upcountry Maui. Según datos oficiales, 1.418 personas se encontraban el viernes en los seis refugios temporales que se han habilitado para atender a los afectados por la tragedia natural más grave que ha vivido el archipiélago estadounidense en su historia. El gobernador de Hawái, Josh Green, admitió que todavía puede pasar más de una semana antes de que las autoridades locales puedan peinar los restos calcinados de la histórica ciudad de Lahaina, para hacerse una idea del número total de víctimas fatales.

Se ha advertido a los residentes y turistas que se mantengan fuera del área del siniestro, debido a los peligros existentes, como las partículas tóxicas en el aire. La ciudad portuaria de Lahaina, que en el siglo XIX gozó de gran importancia social y económica, y llegó a ser durante medio siglo capital del Reino de Hawái, quedó destruida casi en su totalidad. Se ha perdido en torno al 80%, según asegura el Gobierno del Estado. La Agencia Federal para el Manejo de Emergencias (FEMA, por sus siglas en inglés) y el Centro de Desastres del Pacífico (PDC, por sus siglas en inglés) estimaron este sábado que reconstruir Lahaina costará al menos 5.520 millones de dólares. Hasta este viernes, un total de 2.207 estructuras resultaron dañadas o destruidas en la ciudad, la mayoría edificios residenciales, y 2.170 acres (8,78 kilómetros cuadrados) se quemaron.

El desastre más grave en la historia de Hawai

Aunque el gobernador de Hawái ya calificó la tragedia como el desastre natural más grave en la historia del archipiélago, todavía no ha alcanzado en número de fallecidos a los del tsunami de 1946, que acabó con la vida de 158 personas antes de que el territorio se convirtiera en un Estado de Estados Unidos. No obstante, se calcula que los muertos podrían llegar a mil cuando se acaben los incendios y se comience la tarea de peinar los lugares más afectados. Green señaló que la crisis climática ha sido la principal responsable de lo sucedido. La fuerte sequía que ha afectado a las islas en los últimos meses, así como los vendavales procedentes del huracán Dora, han provocado que las llamas se extendieran a una velocidad mucho mayor, según las autoridades locales, dificultando además las labores de extinción.

El jueves, el Presidente estadounidense, Joe Biden, declaró la situación de desastre en Hawái y ordenó el envío de ayuda federal para complementar los esfuerzos de recuperación estatales y locales en las áreas afectadas por unos incendios forestales que comenzaron el martes 8 de agosto.