El Servicio de Impuestos Internos (SII) presentó una querella contra las casas de apuestas online Betsson, Betway, Estelarbet, Betfaraon, Betano, Coolbet y Latamwin, por evasión de impuestos y ejercicio clandestino del comercio. La querella también incluye a la Asociación Nacional de Fútbol Profesional (ANFP), por haber celebrado contratos con estas empresas.
De acuerdo al organismo fiscalizador, las casas de apuestas online no cuentan con la autorización de la Superintendencia de Casinos de Juego para operar en Chile. Además, señalan que estas empresas no pagan los impuestos que les corresponden por sus actividades en Chile.
Según la Superintendencia de Casinos de Juego (SCJ), salvo los juegos de azar desarrollados por la Lotería de Concepción, Polla Chilena de Beneficencia y Teletrak, “que cuentan con norma expresa que los habilita para operar determinados juegos de azar en línea, las demás personas naturales o jurídicas distintas a las referidas en nuestro país, no podrían desarrollar juego de azar en línea, al no contar con una norma de rango legal expresa que los habilite para ello”
Impuestos Internos también acusa a la ANFP de haber celebrado contratos con estas empresas, pese a que sabía que estas no contaban con la autorización para operar en Chile. El organismo señala que estos contratos habrían permitido a las casas de apuestas online promover sus actividades en Chile y captar clientes chilenos.
La querella del ente fiscalizador es un nuevo capítulo en la investigación que se lleva a cabo en Chile sobre las actividades de las casas de apuestas online. En febrero de 2023, la Fiscalía Oriente de Santiago abrió una investigación por presunto lavado de dinero en el marco de las actividades de estas empresas.
La investigación del SII y de la Fiscalía está generando preocupación en el mundo del fútbol chileno. El presidente de la ANFP, Pablo Milad, ha señalado que la asociación está cooperando con las autoridades en la investigación. Milad también ha dicho que la ANFP no sabía que las casas de apuestas online no contaban con la autorización para operar en Chile.