El magnate de los medios y ex Primer Ministro italiano, Silvio Berlusconi, que murió el 12 de junio a los 86 años de edad, le dejó 100 millones de euros (109 millones de dólares) a su última novia, Marta Fascina, de 33 años, según su testamento hecho público este jueves. Fascina, a quien Berlusconi llamaba «mi esposa» aunque no estuvieran casados-, es también diputada del partido Forza Italia, fundado por el multimillonario.
Su última pareja se beneficia de un legado importante, pero modesto en comparación con el patrimonio del hombre de negocios, estimado por Forbes en 6.400 millones de euros (casi 7.000 millones de dólares) y que irá esencialmente a sus cinco hijos nacidos de dos matrimonios, a los que se leyó el testamento en la víspera, y cuyo contenido fue hecho público por la agencia italiana Ansa.