Esta mañana la justicia europea ha dejado sin inmunidad a Carles Puigdemont y a otros dos eurodiputados independentistas catalanes, Toni Comín y Clara Ponsatí. Esta sentencia abre la vía para que España pueda reactivar la petición de extradición y así juzgarlos. Pero antes, la Justicia belga deberá pronunciarse sobre su entrega. Puigdemont huyó a Bélgica en 2017 tras la celebración en Cataluña de un referéndum ilegal de independencia.De esta manera el tribunal con sede en Luxemburgo desestimó todos los motivos formulados por los tres eurodiputados imputados, “en particular sus alegaciones según las cuales el Parlamento incurrió en error al concluir que el referido proceso judicial no se presentó con la intención de dañar la actividad de los diputados”, según el comunicado oficial de la institución judicial. Asimismo estableció que “al examinar un suplicatorio de suspensión de inmunidad, no corresponde al Parlamento analizar la legalidad de los actos judiciales españoles, pues esta cuestión es competencia exclusiva de las autoridades nacionales”.
La sentencia también entrega la razón al Estado de España en la interpretación que ha hecho el tribunal Supremo sobre la inmunidad de los europarlamentarios cuando ha establecido que estos están blindados en Europa desde el momento en que acceden al escaño, e incluso con la inmunidad levantada, pueden moverse por la UE para asistir a plenos y a actos derivados de su cargo; pero dentro de España la inmunidad funciona como para los diputados nacionales, lo que implica que Puigdemont, TonI Comín y Clara Ponsatí no cuentan con ese privilegio porque fueron procesados en territorio español el año 2018, cuando todavía no eran eurodiputados (lo son desde junio de 2019). Esto implica que podrán ser detenidos si pisan suelo español.
El tribunal europeo, de esta forma, ha retirado este miércoles la inmunidad parlamentaria del expresidente catalán Carles Puigdemont y dos de sus exconsejeros en la Generalitat, Toni Comín y Clara Ponsatí. La decisión da vía libre al juez del Tribunal Supremo Pablo Llarena para volver a emitir una orden de detención europea reclamando la entrega a España de los tres políticos independentistas, que permanecen fugados desde octubre de 2017. Cabe recurso contra esta resolución, que también obliga a los políticos de Junts per Catalunya, dirigentes del procés independentista y hoy eurodiputados, a asumir sus gastos del juicio y los de la Eurocámara contra la que habían recurrido.
En un mensaje en las redes sociales, Puigdemont ha confirmado, una vez conocida la sentencia de la Sala Sexta ampliada del tribunal de primera instancia de Luxemburgo, que recurrirá la decisión ante la institución superior, el Tribunal de Justicia de la UE (TJUE). “Nada se acaba, todo lo contrario. Todo sigue. Presentaremos recurso en el TJUE, y defenderemos hasta el final nuestros derechos fundamentales, que son también los derechos fundamentales de los catalanes y los europeos. Con el mismo espíritu del primer día, trabajando por ganar la libertad”, ha tuiteado el expresident desde Bruselas. También ha manifestado que no esperaba una decisión de esta naturaleza de la justicia europea. Por su parte el actual presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, de ERC, ha mostrado en la misma red social su “apoyo” a Puigdemont, Ponsatí y Comín, y ha añadido: “Queda camino en Europa. ¡A vuestro lado!”
