La Armada de Chile presentó plan de construcción naval a la marina Argentina

El plan nacional contínuo de Construcción Naval, que se desarrolla desde la II Zona Naval de Talcahuano, fue uno de los aspectos más importantes abordados en la última reunión bilateral entre las Armadas de Chile y Argentina. Este plan incluye el proyecto Escotillón IV, que contempla la construcción de cuatro embarcaciones multipropósito. Tendrá la capacidad de operación de helicópteros, movimiento de carga con grúa, transporte de contenedores y vehículos pesados y de pasajeros, y podrá transportar 250 efectivos de la Brigada Anfibia Expedicionaria. El primero en el cual se está trabajando a flote es el futuro rompehielos «Almirante Biel» de la Armada. El buque tendrá una capacidad de operación de 187 días al año, con una estructura de 110 metros de eslora (largo), 21,8 metros de manga (ancho) y un desplazamiento de 7.987 toneladas. La embarcación dispondrá de un alcance de 7.000 millas náuticas y 30 días de autonomía.

Una historia de cooperación mutua

 El Jefe del Estado Mayor General de la Armada chilena, vicealmirante Yerko Marcic Conley, sostuvo que «tenemos una historia de cooperación, una historia de trabajo conjunto; los cimientos de la relación están construidos, son firmes y ahora continuamos edificando. Hay muchas cosas que hacemos juntos y que queremos perfeccionar, pero también buscamos cómo avanzar en cosas nuevas, porque las necesidades también van mutando. El conocimiento personal entre las autoridades navales es algo muy importante, porque cuando uno se conoce personalmente y construye una amistad personal, como es el caso, todo fluye más eficientemente”.

Cuarenta años de firma del Tratado de Paz

Para el Subjefe del Estado Mayor General de la Armada Argentina, vicealmirante Eduardo Antonio Traina, en estas reuniones «el objetivo principal es coordinar todas aquellas actividades que nosotros realizamos dentro del marco de nuestro nivel de cooperación y nivel de trabajo en conjunto. Cumplimos casi cuarenta años de la firma del Tratado de Paz, que hermana a nuestros países, y llevamos treinta y ocho años de reuniones bilaterales para poder acordar todas las actividades; y, además, hemos trabajado juntos veinticinco años haciendo la Patrulla Antártica Naval Combinada, que creo que es nuestro mayor elemento de juicio para demostrar que trabajamos juntos en pos de la salvaguarda de la vida humana, del mar y protección del medio ambiente. Estos son ejemplos de que podemos trabajar de una manera totalmente amigable y fluida”.

Además de las reuniones de trabajo, la delegación trasandina tuvo la oportunidad de recorrer una unidad de la Escuadra Nacional, la fragata “Almirante Williams”, aparte del Servicio Hidrográfico y Oceanográfico de la Armada, donde conocieron las capacidades del Sistema Nacional de Alarma de Maremotos. Las visitas profesionales incluyeron también la Dirección General del Territorio Marítimo y Marina Mercante y sus Direcciones Técnicas, la Dirección de Seguridad y Operaciones Marítimas y la Dirección de Intereses Marítimos y Medio Ambiente Acuático. El proyecto, que comenzó a gestarse en 2019, se estima que esté en construcción en Asmar Talcahuano hasta 2024.

José Sepúlveda, periodista.