Vlado Mirosevic, diputado oficialista del Partido Liberal (PL), anunció su renuncia a la presidencia de la mesa de la Cámara Baja, y junto con ello se refirió a «los momentos difíciles y la agresividad política que se ha vivido». A través de un mensaje en Twitter, el parlamentario afirmó que su dimisión se produce “en el tiempo acordado” por las distintas fuerzas políticas.
Destacó Mirosevic que «vivimos momentos muy difíciles, de gran agresividad política y desorden dentro de la Cámara. Sin embargo, espero haber estado a la altura en el intento de poner orden y restaurar el diálogo y la convivencia cívica, tan necesaria en un Congreso Nacional“.
La Mesa de la Cámara ha atravesado recientemente momentos turbulentos. En primer lugar, se produjo la renuncia de su vicepresidente, Carlos Bianchi, quien sostuvo que buscaba contribuir a acelerar el proceso de negociación y lograr una mejor administración de la mesa de la Cámara de Diputados. Bianchi también mencionó la necesidad de ampliar la autonomía del trabajo como colegisladores, y criticó una supuesta coordinación del Ejecutivo, así como la complicidad política de distintos sectores para evitar la discusión en torno al sexto retiro de fondos de pensiones. Luego se difundió el caso de la Fundación Democracia Viva, que involucra a Catalina Pérez, de Revolución Democrática (RD), segunda vicepresidenta de la Mesa. La parlamentaria decidió suspender su participación en la testera de la Cámara tras las acusaciones en torno a un convenio entre su ex pareja, Daniel Andrade, y el ex seremi de Vivienda de Antofagasta, Carlos Contreras, ambos también militantes de esa colectividad política de la Izquierda.
En esa línea, el viernes último la bancada del Partido Republicano presentó una moción de censura contra la mesa liderada por Mirosevic, argumentando que los miembros de la directiva “no merecen salir por la puerta ancha” debido a los antecedentes conocidos recientemente sobre posibles irregularidades en convenios con fundaciones.
