* Las más de 27.000 agresiones a menores verificadas por la ONU durante el año pasado incluyen matanzas, mutilaciones o reclutamiento de niños, entre otras actividades ilícitas. El número de ataques a escuelas y hospitales aumentó un 112%.
El número verificado de niñas y niños afectados por violaciones graves en conflictos armados en 2022, creció en comparación con 2021, según informó la representante especial del Secretario General de la ONU sobre esta temática. Durante la presentación del informe anual de António Guterres sobre menores y conflictos armados, Virginia Gamba explicó que las Naciones Unidas lograron verificar 27.180 violaciones graves el año pasado. Especificó que las violaciones más cometidas fueron la matanza (2.985) y la mutilación (5.655) de 8.631 niños, seguidas del reclutamiento y la utilización de 7.622 menores y el secuestro de 3.985.
Entre las naciones con los niveles más altos de violaciones graves comprobadas listó a Israel y Palestina, Siria, la República Democrática del Congo, Somalia, Ucrania, Afganistán y Yemen. Asimismo, destacó un elevado número de negaciones de acceso humanitario (3.931 incidentes) y un aumento del 112 % en el número de ataques contra escuelas (1.163) y hospitales (647), en particular en Ucrania, Burkina Faso, Israel y Palestina, Myanmar, Mali y Afganistán.
Rusia aparece por primera vez en el informe
Pese a que Rusia aparece en el anexo del informe como una de las partes que cometió violaciones graves contra menores en situaciones de conflicto armado no sometidas al control del Consejo de Seguridad, se la incluyó como una de las “partes que pusieron en práctica medidas para mejorar la protección de los niños”. En tanto, en Ucrania, el Secretario General decidió incluir a las fuerzas armadas rusas y a los grupos armados afiliados en la sección B del anexo II por ataques contra escuelas y hospitales y por la muerte de niños, en particular mediante el uso de armas explosivas en una amplia zona de impacto (…), que causaron un número muy elevado de víctimas y la destrucción de infraestructuras.
Gamba especificó que la inclusión de las fuerzas armadas rusas y sus grupos armados afiliados en ese apartado se debió al compromiso que mantienen con ella desde el año pasado y también tras su visita a Rusia el mes de mayo. “Me comprometo a continuar con este compromiso para asegurarme de que se han aplicado las medidas identificadas para poner fin a las violaciones graves de los derechos de los niños y prevenirlas.” El informe también lanza una advertencia para Ucrania debido al elevado número de niños muertos y mutilados y a que se les atribuyen ataques contra escuelas y hospitales y recuerda que el mandato de la representante se aplica a todas las partes en conflicto, tanto si se cometen violaciones graves durante operaciones ofensivas como defensivas. “El Secretario General seguirá atento a la forma en que las fuerzas ucranianas responden a sus peticiones. Pero elogió los progresos realizados por el gobierno ucraniano en la adopción de nuevas medidas para proteger a los niños desde que comenzó mi compromiso con ellos el año pasado”, afirmó Gamba.
Colombia: reclutamiento de niños por grupos armados
Aunque se verificaron 290 violaciones graves contra 209 niños y niñas en Colombia (122 niños, 83 niñas, y cuatro cuyo sexo se desconoce), el informe encomió al gobierno por los avances alcanzados en la prevención de las infracciones, “y por la suspensión en agosto de 2022 de los ataques aéreos contra campamentos de grupos armados, en los que podría haber habido niños”. Sin embargo, el estudio destacó la preocupación del Secretario General por “el continuo aumento en el número de violaciones graves, especialmente en lo que concierne al reclutamiento, la utilización, la matanza y mutilación de niños por grupos armados, en particular por grupos disidentes de las FARC-EP”. António Guterres también expresó su inquietud por el aumento de la violencia sexual contra niñas, especialmente cuando están vinculadas a grupos armados, e instó a todas las partes a detener y prevenir estos ataques.